AVISO:
CONTINÚA LA HUELGA POR FALTA DE COMENTARIOS SUFICIENTES
EL SIGUIENTE POST, ES UN INÉDITO PREVIO AL INICIO DEL CONFLICTO
Pocas situaciones de mi vida actual han podido arrancarme una carcajada imposible de amortiguar, tan infinita como capaz de posponer por un buen rato mi habitual, triste y desanimado estado de ánimo.
[...]
A vos, que con tu ingenuidad angelical asististe puntualmente a tu primera reunión de consorcio.
A vos, que preferiste engañarte con un papel que sólo anunciaba una escueta orden del día, con puntos menores como dineros gastados, bombillas quemadas o ascensores reparados.
A vos, que jamás leiste el último punto, donde mencionaba el cambio o renovación de autoridades.
A vos, y a mí también, que desde la ignorancia propia del recién llegado (no a otro país, sino a otra vivienda diferente a la tradicional casa con pileta y el acogedor anonimato en el barrio), desplegamos un interrogatorio de obviedades frente a un público curtido y entrenado para hacer del sistema vertical un verdadero estilo de vida.
A nosotros, que con tanta honestidad, sólo quisimos ser testigos de esta celebración comunal con un único propósito: dejar constancia de que toda la ropa que caía a nuestro patio (circunstancia también conocida como "la maldición del primer piso") se encontraba perfectamente almacenada en alguna parte de nuestra cocina, a la espera de que alguien se dignase a reclamarla, situación que hasta el momento jamás había sucedido y que conllevaba a una segunda situación de molestia traducida en cierto diálogo reiterativo:
-esta ropa la voy a tirar a la mierda
-no, no la tires, ¿mirá si alguien la reclama?
-hace tres meses que está ahí
-no la podemos tirar, cuando se haga la reunión de consorcio yo me voy a quejar
-tanta formalidad al pedo
-dejala ahí, que si alguien la llega a reclamar un día y no la tenemos, van a decir que somos unos argentinos ladrones*
Nuevamente a vos, que te contentaste momentaneamente con la decisión de no volver a participar nunca más de tanta parodia.
Y finalmente a vos, que te quedaste quietito al lado de la columna, en la dirección justa para escuchar como esa manga de oportunistas abrochaban a un pobre novato en el último punto de la bendita orden.
Por todo eso y por doce meses más...gracias.
Gracias por tu cara.
Gracias por esa mirada esquiva, por esa dentadura trabada, ese seño fruncido pero esa sonrisa forsada con un sonido ahogado, a medio camino de la desesperación y del compromiso asumido.
Gracias por aceptar a la fuerza.
Gracias por esa puta diplomacia que siempre te critico.
Bienvenido presidente.
Tu infortunio se convirtió en el grotesco que impulsa mi vida.
No puedo dejar de reir.
Perdón. Pero soy feliz de nuevo, aunque sea por un rato.
*Nota: es propio del emigrado convivir con cierta persecuta. Si esto hubiése sucedido en Callao y Corrientes, simplemente seríamos ladrones, pero aquí en Curros Enriquez Nº 6, nos sentimos argentinos ladrones.
A vos, que jamás leiste el último punto, donde mencionaba el cambio o renovación de autoridades.
A vos, y a mí también, que desde la ignorancia propia del recién llegado (no a otro país, sino a otra vivienda diferente a la tradicional casa con pileta y el acogedor anonimato en el barrio), desplegamos un interrogatorio de obviedades frente a un público curtido y entrenado para hacer del sistema vertical un verdadero estilo de vida.
A nosotros, que con tanta honestidad, sólo quisimos ser testigos de esta celebración comunal con un único propósito: dejar constancia de que toda la ropa que caía a nuestro patio (circunstancia también conocida como "la maldición del primer piso") se encontraba perfectamente almacenada en alguna parte de nuestra cocina, a la espera de que alguien se dignase a reclamarla, situación que hasta el momento jamás había sucedido y que conllevaba a una segunda situación de molestia traducida en cierto diálogo reiterativo:
-esta ropa la voy a tirar a la mierda
-no, no la tires, ¿mirá si alguien la reclama?
-hace tres meses que está ahí
-no la podemos tirar, cuando se haga la reunión de consorcio yo me voy a quejar
-tanta formalidad al pedo
-dejala ahí, que si alguien la llega a reclamar un día y no la tenemos, van a decir que somos unos argentinos ladrones*
Nuevamente a vos, que te contentaste momentaneamente con la decisión de no volver a participar nunca más de tanta parodia.
Y finalmente a vos, que te quedaste quietito al lado de la columna, en la dirección justa para escuchar como esa manga de oportunistas abrochaban a un pobre novato en el último punto de la bendita orden.
Por todo eso y por doce meses más...gracias.
Gracias por tu cara.
Gracias por esa mirada esquiva, por esa dentadura trabada, ese seño fruncido pero esa sonrisa forsada con un sonido ahogado, a medio camino de la desesperación y del compromiso asumido.
Gracias por aceptar a la fuerza.
Gracias por esa puta diplomacia que siempre te critico.
Bienvenido presidente.
Tu infortunio se convirtió en el grotesco que impulsa mi vida.
No puedo dejar de reir.
Perdón. Pero soy feliz de nuevo, aunque sea por un rato.
*Nota: es propio del emigrado convivir con cierta persecuta. Si esto hubiése sucedido en Callao y Corrientes, simplemente seríamos ladrones, pero aquí en Curros Enriquez Nº 6, nos sentimos argentinos ladrones.
A los a ayyya!
ResponderBorrarSoy leo y quiero aclarar algo... marina no esta sufriendo, la está pasando ¨ bomba ¨. Ignoren todos los comentarios acerca de, ¨ hace tiempo que no me rio ¨, y ¨ pocas situaciones de mi vida actual han podido arrancarme una carcajada imposible de amortiguar ¨ . Donde quedó aquel inmigrante que se maravillaba por todo lo nuevo y que no conocía el idioma??? Esta nueva inmigración se salta ese proceso y va directamente a las lágrimas, lastima con sus comentarios y cree que todo el mundo le debe algo. La corto acá porque tengo que ir a cambiar un bombilla de luz que se jodió en el edificio...
Saludos a todos.
AAAAAAAAAAAAAJAJJAJAJ
ResponderBorrarAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAJAJJAJAJ
una genialidad
una genialidad
Contamelo de nuevo
ME gusta el blog. No se porque tiene pocos comentarios (el mio sufre del mismo mal). Prometo pasar seguido y comentar mas.
ResponderBorrar